MADRID, 11 Feb. (EUROPA PRESS) - El Real Madrid recibe mañana (20.45 horas/Telemadrid) al Maccabi Electra de Tel Aviv en un partido de obligado triunfo para los de Joan Plaza, si quieren mantener intactas sus aspiraciones de clasificarse para los cuartos de final de la competición.
Con dos ajustadísimos triunfos ante Regal FC Barcelona y en Berlín contra el Alba, los madridistas son líderes de su grupo, aunque la situación es algo ficticia y no debe servir de relajación, ya que ganar los partidos de casa y al Alba es el primer paso para contar con opciones.
El partido es una reedición del vivido la pasada campaña, en la que los madridistas se quedaron eliminados en este 'Top-16' tras sumar tres triunfos y perder los dos partidos contra el Maccabi, además de en la cancha del Olympiacos.
Entonces, el encuentro en Vistalegre fue épico y se resolvió para los macabeos 100-103 en la prórroga, resultado que mañana hipotecaría las aspiraciones del Real Madrid, que sabe que tiene que dejar fuera de los cuartos a Maccabi o Barcelona, para lo que ganar en casa es la única solución, además de esperar resultados, ya que podría darse el caso de un hipotético triple empate 4-2 si los tres ganan en sus partidos de casa y en Berlín.
Por ello, los madridistas, además de vencer, deberían confiar en ampliar su 'basket-average', para lo que se hace necesario mejorar en el juego mostrado en los últimos partidos, donde el sufrimiento ha sido el gran protagonista. Las diez victorias consecutivas, siete en la ACB y tres en Europa mantienen al equipo en posición de ventaja, pero los dos últimos encuentros tras el parón, frente a Alba Berlín y Cajasol, han desvelado las carencias del grupo.
En el lado positivo sobresale el espíritu de lucha y el afán del equipo de no dar un partido por perdido, que les permitió remontar 19 puntos en Berlín y conquistar el triunfo en Sevilla tras dos prórrogas, pero en el negativo hay que destacar su corta plantilla, con algún jugador que apenas aporta y otros con presencia casi testimonial.
Reyes, Bullock y Llull se erigen en los líderes del grupo y Hevelle y Mumbrú, suman, pero la baja de Raül López está afectando, ya que Pepe Sánchez no está en buen nivel, como tampoco Marko Tomas, mientras los nuevos dan varias de arena antes de una de cal y casi nunca durante un partido completo. "El día que logremos jugar bien más de tres o cuatro puede ser la bomba, y espero que ese día llegue pronto", deseaba Plaza el domingo, expresando el sentir de los madridistas.
Ante el finalista de la pasada 'Final Four' y campeón en 2004 y 2005, no habrá el mismo margen de error que frente al anfitrión de la próxima o el colista de la ACB, por lo que mañana será clave saber entrar en el partido porque "llegar tarde" no puede volver a servirles de excusa.
Además, aunque el Maccabi no esté al nivel de años atrás, y llegue de perder con estrépito ante el Barça, sigue teniendo un bloque potente y de calidad. El ex NBA Carlos Arroyo y el ex de Unicaja Marcus Brown (que está a 35 puntos de ser el primer jugador en alcanzar los 2.500 en la competición), son dos de sus principales amenazas.
Además destacan Lior Eliyahu y el pívot D'Or Fischer --jugador con segundo mejor ranking de la competición-- y que, junto a Casspi, han sido el quinteto titular en los dos partidos que los de Tel Aviv llevan del 'Top-16'.
El deseo es que el protagonismo esté sobre el parqué y no en la grada, con hipotéticas protestas en favor de Palestina, como ya ocurriera la semana pasada en el Palau, debido a la situación política en la franja de Gaza, y con presencia del servicio secreto de Israel, el Mosad, en el pabellón.
FICHA TÉCNICA.
--EQUIPOS.
REAL MADRID: Llull, Bullock, Tomas, Reyes, Hervelle --posible cinco inicial--; Sánchez, Hosely, Massey, Mumbrú, Van den Spiegel, Hamilton y Jorge Santana.
MACCABI ELECTRA: Arroyo, M. Brown, Casspi, Eliyahu, Fischer --posible cinco inicial--; D. Brown, Burstein, Green, Sharp, Simmons, Gaines y Hagag.
--PABELLÓN: Vistalegre.
--HORA: 20.45/Telemadrid.
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