domingo, 22 de marzo de 2009

Regatas se robó la ventaja

Olímpico se quedó con el primer clásico clásico de la serie

El conjunto correntino se impuso en Bahía Blanca a Estudiantes por 107-97, tras dos suplementarios, en el arranque de los playoffs de reclasificación de la Liga Nacional. Regatas se quedó, ahora, con la ventaja de campo. Boca no tuvo problemas para vencer a Independiente por 90-76, lo mismo que Sionista a Quilmes por un amplio 79-57. Después de un primer tiempo parejo, Olímpico derrotó en La Banda a Quimsa por 82-73. Este domingo continúan las cuatro series. En la foto, Derrick Alston (Boca).

(TELAM). Regatas Corrientes venció a Estudiantes en Bahía Blanca, en un maratónico y emotivo partido, que necesitó de dos tiempos suplementarios, por 107-97, tras igualar en 83 y luego en 92, en el primer juego de los playoffs de la Reclasificación de la Liga Nacional. 

Con una actuación destacada de Federico Kammerichs, quien anotó 26 puntos y anuló por completo a Nelson, sumado al buen trabajo de Acosta y el uruguayo Taboada y la experiencia de Montecchia, Regatas se quedo con el primer juego de los playoffs al mejor de cinco. 

En el inicio, la visita mostró su intención de ganar el juego, defendiendo duro, corriendo, y tomando mal balanceado a Estudiantes, y de la mano de Kammerichs, comenzó a sacar ventajas, mientras que el local no encontraba claridad en ofensiva. Todo cambio tras un tiempo muerto solicitado por Richotti, porque Estudiantes salió a presionar más arriba, congestionó su zona pintada, no permitió tiros cómodos, se aseguró el rebote defensivo y pudo trabajar mejor las ofensivas, con Levy como abanderado. Los correntinos perdieron el orden y la claridad, y de estar 16-8 arriba a falta de cuatro minutos, pasaron a perder 19-16, pero un triple de Acosta y un doble de Kammerichs le permitieron finalizar ganando el cuarto 19-21. 

El segundo parcial fue dinámico, entretenido, muy parejo con ambos elencos defendiendo muy duro, con muchísima fricción bajo los cestos, con altísimos rendimientos de Cangelosi y Barrera en el conjunto bahiense, mientras que sólo el charrúa Taboada (12 puntos con 3 de 4 en triples) aportaba algo en la visita. De esa forma, y poco a poco, Estudiantes logró sacar una pequeña diferencia en el tanteador gracias a la presión y al doblaje de marcas bajo su aro, mientras que Regatas se fue desdibujando, respecto del primer cuarto, por eso el local se fue al descanso 43-39 arriba. 

El arranque del tercer segmento, merced a una muy buena defensa y a una ráfaga, Estudiantes (metió un parcial de 10 a 2) estiró la diferencia a diez, pero los correntinos ajustaron su defensa, hicieron circular la bola y se pusieron nuevamente en juego, a falta de seis minutos. Un par de faltas técnicas sancionadas primero a López y luego a Acosta, hicieron que el dueño de casa otra vez sacara diez de luz y fuera manejando la diferencia durante un cuarto que por momentos se tornó áspero y por momentos parejo, pero que tuvo a Estudiantes al frente al finalizar el mismo, 70-61. 

Con un arranque demoledor, estampando un parcial de 14 a 5, bajo la conducción inspiradísima de Alejandro Montecchia (2 triples consecutivos) más las apariciones de Stanton, Regatas igualó el juego en 75 a falta de cinco minutos para terminar. De allí en más el juego se hizo muy parejo de ida y vuelta, con la visita aprovechando los errores del dueño de casa, bajo la experta conducción del ex base de la selección nacional, Montecchia, quien generó juego para sus compañeros, mientras que Estudiantes, perdió el orden y la paciencia, y solo por empuje y amor propio, pudo mantenerse, y llevar el juego a suplementario, tras igualar en 83. En la prorroga, se mantuvo la tónica del último cuarto, imprecisión, nerviosismo, y una paridad notable, Acosta sostuvo a los correntinos, y Cangelosi con dos triples a los bahienses por eso terminaron igualados 92-92. Con ambos elencos muy cansados, agotados el juego se mantuvo impreciso, pero fue Regatas el que sacó mejores réditos vía Taboada, y Kammerichs, más la certeza de Acosta desde la línea sentenciaron el juego a favor de la visita.


(TELAM). Olímpico de La Banda hizo pesar la localía y su buena campaña en la fase regular, para ganarle en el clásico santiagueño a Quimsa por 82 a 73, en el primer juego de la Reclasificación de la Liga Nacional. 

El encuentro comenzó de manera favorable para el equipo de la capital santiagueña porque entró más concentrado y supo meterle bien el balón a Mikulas en la zona pintada y castigaba con Walker desde el perímetro para meter un parcial de 11 a 6. Pero los bandeños reaccionaron, gracias a su potente juego interno de Glover y Williams para pasar de ese modo al frente en el marcador y ganar el cuarto 21 a 20. 

El segundo tramo fue parejo, en Quimsa apareció Allen en la zona pintada, mientras que los locales continuaban lastimando con los norteamericanos debajo del aro. El parcial fue parejo y se lo jugó palo a palo, con final favorable a los de Romano por 21 a 20 para llegar al entretiempo igualados en 41. 

En el tercer segmento hubo un solo equipo en cancha y este fue el de Gonzalo García. Trovellesi condujo muy bien al quinteto y en la definición se destapó Mariano Byró, para convertir 11 de sus 16 puntos en el partido. Esto le permitió a los locales tener un pasaje tranquilo en el partido y ganar la etapa por 10 puntos, 26 a 16 y llegar a los últimos diez minutos, 67 a 57. 

En el último cuarto, la visita reaccionó con Mikulas y dos bombazos impresionantes de Wanderson para ponerse a 5 en el marcador, 65 a 60, pero una bomba de Byró y otra de Satterfield., le permitieron al Negro de La Banda sacar una diferencia de 9 y mantener el resultado hasta el final y ganar el clásico.


(TELAM). Con un rendimiento colectivo e individual muy superior a su adversario, Juventud Sionista de Paraná venció ampliamente como local a Quilmes de Mar del Plata por 79 a 57. Con esta victoria, el equipo paranaense se puso 1 a 0 en uno de los play offs de Reclasificación de la Liga Nacional. El domingo, a las 21 y también en el Moisés Flesler, se disputará el segundo cotejo de la serie al mejor de cinco. 

El comienzo fue parejo y a pura defensa. De a poco los dos fueron encontrando espacios en ofensiva y se alternaron en el dominio en el marcador. Sin embargo, Sionista, con un par de recuperos, dos corridas consecutivas de Maurice Spillers, un doble de Javier Martínez y otro de Chuckie Robinson tomó una interesante luz de 7 (19 a 12). Es más, en el cierre Eduardo Villares metió una bomba de tres que le dio a su equipo distancia de 8 (22 a 14). 

Con el correr de los minutos, Quilmes decreció en su rendimiento y por eso se fue en desventaja al primer mini descanso. Con un parcial de 5 a 0, los marplatenses se pusieron a tiro en el arranque del segundo chico (22 a 19). Pero el local ajustó la defensa y respondió rápidamente con un 6 a 0 para alejarse a 9 (28 a 19). La visita dependía demasiado de apariciones individuales -principalmente de Carlos Dixon (11 puntos)-, mientras que los de Svetliza mostraban un mejor juego en conjunto. Igualmente, en el epilogo de la etapa los locales se quedaron sin gol y su rival aprovechó para achicar a 7 (37 a 30). 

En los primeros minutos del complemento todo fue muy desprolijo y con bajo goleo. Pero, en una ráfaga y promediando el cuarto, los dueños de casa obtuvieron la máxima de 13 (47 a 34). Quilmes seguía sin encontrar la química de equipo, en tanto que el equipo paranaense hacía todo bien. Por eso, no extrañó que a dos minutos del final de penúltimo cuarto el parcial fuera de 20 a 6 y la ventaja de 21 (57 a 36). Aunque la visita tuvo una leve reacción, solamente descontaron 2 puntos en lo que quedó del chico (59 a 40). 

El último intento de Quilmes de dar vuelta la historia lo sepultó un "triplazo" de Juan Cantero de más de 7 metros y un doble de Alejandro Burgos. Así, con 5 minutos y medio todavía por jugar, Sionista logró 22 inalcanzables puntos a favor (66 a 44). Es más, la máxima del ganador fue de 28 y ante un rival deslucido y que a excepción de los primeros instantes del cotejo, luego fue ampliamente superado en el trámite y el marcador.


(TELAM). Boca Juniors le ganó como local a Independiente de Neuquén por 90-76, en el primer partido de la serie de Reclasificación, al mejor de cinco, de la Liga Nacional. Con la producción de Gabriel Fernández de 23 puntos y 6 rebotes, y el habitual aporte de Juan Espil de 19 puntos y 5 de 7 en triples, el xeneize dominó gran parte del juego y supo recuperarse de un segundo cuarto en el que el equipo neuquino lo pasó por arriba. En la visita, lo mejor lo aportó Federico Marín con 16 anotaciones, y Brice Assie con 12 puntos y 12 rebotes. 

La paridad del inicio del partido se cortó al promediar el cuarto, cuando Boca empezó a estirar diferencias a partir de la efectividad de Espil desde los 6.25m (3 de 4) y el dominio de Alston en los dos tableros (6pts, 5 reb). Por su parte, Independiente no trabajó las ofensivas, tuvo bien controladas sus opciones de ataque y en defensa sufrió la buena circulación de balón que imprimieron los dirigidos por Duró. En ocho minutos, el local llegó a sacar veinte de diferencia (26-6). En los últimos dos minutos, el ingreso de Scales (4) emparejó la lucha en la llave y le dio más intensidad a la defensa para cerrar mejor el cuarto (28-14). 

En el segundo capítulo, Scales (3) siguió siendo la referencia ofensiva del local, Marín (9) comenzó a atacar más el aro y todo Independiente fue más agresivo en defensa. Boca, con el recambio perdió solidez adelante y, sobre atrás, atrás. En seis minutos los neuquinos esfumaron la diferencia que llegó a ser de catorce puntos y se pusieron a uno (37-36). Duró metió quinteto titular otra vez y frenó al visitante que se lo estaba llevando por delante. De esa manera, el local equiparó el trámite y se fue al vestuario arriba por 44-40. 

En el tercer cuarto, Boca salió nuevamente como en el comienzo del partido, circuló bien la bola, controló el ataque neuquino y con Fernández al mando del ataque (5 en ese tramo) se escapó en dos minutos a ocho puntos. Independiente se acomodó y recuperó terreno de la mano de Marín (5) para ponerse a dos al promediar el cuarto (52-50); pero volvió a gravitar Espil (8) y, en dos minutos, el local metió un parcial de 11 a 0 para escaparse a trece puntos (63-50) a falta de 3m 15s. De ahí en más, fue todo del local, que con orden defensivo y paciencia en ataque, se llevó el parcial 72 a 57. 

En el último segmento, Independiente volvió a imprimir actitud en defensa y con dos triples (Moodie y Lauro) se acercó a nueve (75-66) en menos de dos minutos. Pero enseguida Boca retomó el control del trámite y con una buena actuación de Calvi (5) y la conducción de Aguirre, manejó la diferencia de diez puntos para llevarse el primer punto de la serie.

Fuente: AdC

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