jueves, 26 de marzo de 2009

En busca del dulce sabor de la victoria


POR ANDONI GONZALEZ-RUA
EL NUEVO HERALD

Con las primeras dos rondas por detrás, 16 equipos se medirán hoy y mañana para decidir quienes llegarán al "Elite 8'' del torneo nacional de baloncesto universitario. Esta noche en la región del oeste, que se disputa en Arizona, Connecticut (29-4) se enfrentará con Purdue (27-9) y el ganador jugará contra el vencedor del enfrentamiento entre Memphis (33-3) y Missouri (30-6).

Los Huskies de Connecticut y los Tigers de Memphis llegan como los gran favoritos pero en una semana donde se reportó que Connecticut violó varias leyes deportivas de la NCAA, podría ser que los Huskies pierdan su concentración.

Los Boilermakers de Purdue llegan a Glendale tras ganar el torneo del Big 10 y podrían sorprender a un equipo con ha dependido demasiado en A.J. Price en los últimos partidos.

Memphis, uno de los grandes favoritos para ganar el torneo entero, no ha perdido desde el 20 de diciembre, 27 partidos seguidos, pero contra los Tigers de Missouri se medirán con el equipo más potente que han enfrentado desde que Syracuse les ganó por última vez.

Missouri ganó el torneo del Big 12 pero tendrán dificultades con el novato Tyreke Evans y el conjunto de John Calipari, quien disputó la final hace una temporada. En la región del este, Pittsburg (30-4) se medirá con Xavier (27-7) y Duke (30-6) con Villanova (28-7) en Boston.

Los Panthers de Pitt también entran como uno de los favoritos y lo más seguro es que Xavier no pueda con ellos. En varias ocasiones este año los Panthers, liderados por DeJuan Blair y Sam Young, han demostrado sus habilidades y, por lo menos en papel, no parece que los Musketeers puedan con ellos.

Duke y Villanova será uno de los partidos más emocionantes del "Sweet 16". Los Bluedevils entraron al torneo como campeones del ACC y aunque tuvieron dificultades a mediados de temporada han remontado fuertemente. Con bastante experiencia se enfrentarán con un Villanova que terminó cuarto en la conferencia más dura del país y quien destruyó por 20 a UCLA en la última ronda.

En Indianápolis el viernes, Lousiville (30-5) buscará eliminar a Arizona (21-13) en la región del midwest y Michigan State (28-6) al campeón de 2008, Kansas (27-7).

Los Cardinals de Rick Pitino entraron al torneo con una de las mejores rachas del país.

Ganaron la mejor conferencia pero realmente no han jugado contra un poder nacional en lo que va de torneo. Muchos les ven como campeones al final, pero primero tendrán que ganar a Arizona, un equipo que casi no llegó al torneo pero que ha batido tranquilamente a sus rivales en las primeras dos rondas.

Los Cardinals deberían tender demasiado talento para los Wildcats pero con la rápida defensa de Arizona y el juego de Nic Wise y Jordan Hill nunca se sabe.

Al mismo tiempo, en la región del sur en Memphis, Oklahoma (29-5) peleará con Syracuse (28-9) y, el gran favorito al comienzo de la temporada, North Carolina (30-4) intentará continuar su racha contra Gonzaga (28-5).

Syracuse posiblemente podría ser el peor equipo posible para Oklahoma. Los Sooners, quienes durante toda la temporada estuvieron en las primeras cinco plazas del ranking nacional pero perdieron cuatro de sus últimos seis partidos antes del torneo, intentarán parar a Jonny Flynn y Eric Devendorf.

Los Orange demostraron en las primeras dos rondas en Miami que son un equipo potente y que podrían ser la oveja negra que se corona al final. El equipo de Jim Boeheim tiene el tamaño en la pintura para parar a Blake Griffin y compañía y avanzarán a la siguiente ronda.

El último partido entre North Carolina y Gonzaga presenta dos equipos acostumbrados a estar en este nivel. Los Tar Heels, coronados por muchos expertos antes de comenzar la temporada, necesitarán un buen juego de Tyler Hansbrough y Ty Lawson, quien jugará definitivamente tras una lesión. Si lo consiguen no hay quien les pare, especialmente en la plantilla de los Bulldogs.

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