Antes del partido que los mediría con Universidad de Concepción el ánimo no era el de los mejores entre los muchachos de Boston College, es que de pronto comenzaba a hipotecarse todo lo bueno que se había realizado en la primera parte de Centro Sur DIMAYOR. Tres derrotas consecutivas (Puente Alto, Deportivo Alemán y Universidad de Concepción –alumnos-) encendían las alarmas; sin embargo, lo hecho el domingo en Maipú fue una inyección anímica para todo lo que queda de cara al Final Four.
He aquí las claves para entender todos los aciertos de Boston College ante los del Campanil en Maipú el pasado domingo y que alienta de cara a lo que vendrá en la fecha siguiente y que se jugará el primer fin semana de julio y que propone visitas a los quintetos de la casa de estudios superiores penquista.
Defensa eficiente: Boston College volvió a defender como acostumbra a hacerlo y eso significó que las opciones de penetración de los jugadores de Universidad de Concepción se redujeran considerablemente. Con esa opción bloqueada quedaba esperar que los tiradores aparecieran, pero lo cierto es que la noche del domingo no aparecían por ninguna parte.
Esa es quizá una de las mayores virtudes de los penquistas. Evandro Arteaga, José Luis Campos, Eduardo Marechal y Samuel Bravo intentaron, pero fallaron y ante la opción de poder concretar de tres y ver que los intentos se hacían infructuosos, la desesperación se apoderó de las manos universitarias ente un aro que se les cerraba claramente.
Anulación de sus principales nombres: Simplemente un buen trabajo defensivo se refleja en que los principales hombres de un equipo no luzcan y eso ocurrió con Universidad de Concepción. Evandro Arteaga fue muy bien marcado. Eduardo Marechal aunque lo intentó en innumerables ocasiones no pudo mostrar la rapidez que lo caracteriza y Jorge Valencia actuó a ratos y también fue bien anulado.
José Luis Campos trató de luchar, pero la apuesta defensiva bostoniana imponía casi siempre individual con presión sobre la salida y o una zona que cerraba las opciones de ingreso a los sureños. Contra lo mismo casi siempre sucumbió Samuel Bravo y esa impotencia sólo se interrumpió en el último parcial cuando se acercaron a la cuenta, pero sólo eso.
Una ofensiva con aciertos en la transición: El ataque de Boston College siempre fue letal. Las transiciones rápidas siempre encontraron manos certeras bajo la tabla. En eso siempre sacaron ventaja, generando Francisco Zepeda, Ronald Cruces y en el encuentro con la canasta: Marco Cornez, Francisco Coro y José Antonio Madrid. Los dirigidos de Carlos Álvarez entendieron las lecciones de tres magros encuentros y levantaron cabeza.
Ahora las Águilas afrontarán los partidos de vuelta de la segunda fase y aquello comenzará el siete de julio cuando los maipucinos visiten a los alumnos de la Universidad de Concepción e intenten vengar la derrota en casa y 24 horas después la visita será al Plantel de Honor de Universidad de Concepción en la Casa del Deporte con la ilusión de ir aún por el Final Four.
Vox Comunicación
Encargados de Prensa Club Deportivo Boston College
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